Ordinaria es una muestra colectiva que aborda las acciones que el cuerpo ejerce sobre una obra y las marcas que los materiales dejan en el cuerpo.
Un tejido son los colores de cada hilo que se superponen, se mezclan y se juntan; pero ver un tejido también es ver la marca de un cuerpo que mueve sus manos sutilmente, que mantiene una postura y que deja, después de ese tránsito, una dirección marcada. El dibujo es una acción cotidiana donde las líneas son una intención. El dibujo sugiere un espacio doméstico, un ejercicio que se repite en un lugar cotidiano; cada mancha, y marca, son también el rastro de un cuerpo en movimiento.
La curaduría de esta muestra se detiene en el trabajo antes del producto final. Nos interesaba exhibir las distancias y cercanías que ocurren durante los procesos de creación. Frente a ello, se busca aquellas interacciones que no han sido legitimadas en el mundo del arte por ser consideradas domésticas, femeninas u ordinarias. Estas son obras que se construyen a partir de oficios que, en su ejecución, recurren a la repetición y a la paciencia. La intención de Ordinaria es hablar del proceso, no solo como el trabajo técnico de las artistas, sino en cómo un cuerpo en movimiento confronta y se apropia de su geografía y su contexto político. De este modo, se muestra la borrosa frontera sobre la concepción del espacio que, en ciertos casos, debido a su naturaleza íntima, representa una confusión entre taller, trabajo y casa, todos espacios de creación.
Link crónica de la muestra.